Toxoplasmosis: ¿Enfermedad de los Gatos?

¿QUÉ ES?

Es una infección causada por un parásito llamado Toxoplasma Gondii y se puede encontrar en cualquier lugar del mundo, siendo más común en climas cálidos y a poca altitud.

 

¿CÓMO SE CONTRAE Y CUÁL ES SU RELACIÓN CON LOS GATOS?

La principal manera en que se contrae la enfermedad es vía orofecal (es decir de las heces infectadas de un gato a la boca). Otras maneras de contraerla son manipulando y/o comiendo alimentos contaminados, sobretodo carne poco cocinada de cerdo; bebiendo agua contaminada y muy raramente por medio de transfusiones de sangre  y/o transplante de órganos de gente infectada.

Todo inicia con los quistes tisulares de Toxoplasma Gondii que se encuentran en animales como ratones y aves (presas de los gatos). El gato se come a su presa y al defecar quedan los quistes en las heces. Estos quistes (ooquistes) son ingeridos por animales como los cerdos, cuya carne luego ingerimos los humanos entrando así en contacto con los quistes del Toxoplasma que al pasar al sistema digestivo, las enzimas rompen los quistes y queda libre el parásito que produce la infección.  Cuando todo esto ocurre en las embarazadas, existe el riesgo de la transmisión transplacentaria a su bebé con las consiguientes complicaciones.

 

¿SABIA USTED?

Pese a que hay diversidad de animales que pueden contener los quistes de Toxoplasma , el gato es el único capaz de eliminarlos y contagiar así a otros con sus heces, motivo por el cual se ha ganado tan mala fama y se dice que ninguna embarazada puede tener gatos.

 

¿QUÉ SÍNTOMAS PRODUCE?

En personas inmunocompetentes, es decir, en personas que tienen un sistema inmune sano, la infección puede no producir ningún tipo de síntomas. En caso que los haya, son inespecíficos, suelen aparecer  1-2 semanas después de entrar en contacto con el parásito y pueden asemejar los de una simple gripe, como son la fiebre y los dolores musculares.

Caso diferente es el de las embarazadas y demás personas con sistemas inmunes debilitados, en las que sí pueden producir efectos graves como daños al cerebro y los ojos en la fase aguda de la enfermedad. En el caso de los bebés infectados durante el embarazo, la mayoría no presenta síntomas al nacer, pero se pueden manifestar posteriormente efectos tan graves como ceguera o retraso mental.

 

¿CÓMO SÉ SI TENGO TOXOPLASMOSIS?

Puede realizarse un examen que detecta los anticuerpos contra Toxplasma Gondii. Los anticuerpos pueden ser de tipo IgG, IgM e IgA. Los más comúmente utilizados son los anticuerpos IgG e IgM. También existen otras pruebas más costosas como la cuantificación de DNA de Toxoplasma Gondii, que detecta al parásito directamente. La  interpretación del examen debe ser realizada por su médico en conjunto con una historia clínica bien detallada de cada caso particular.

La presencia de anticuerpos IgG indica que la persona ha tenido contacto con el parásito en algún momento de su vida. Sin ser criterio diagnóstico, unos títulos elevados de IgG son sugestivos de infección aguda; igualmente si hay seroconversión (que pasa de negativo a positivo) o hay un aumento significativo de los títulos de IgG entre 2 muestras separadas 3-4 semanas sugiere infección reciente.

Los anticuerpos IgM contra Toxoplasma, a diferencia de  lo que ocurre con la mayoría de anticuerpos IgM contra otros microorganismos, pueden permanecer detectables durante meses o incluso años después de producida la infección, por lo tanto su importancia radica en que su ausencia prácticamente descarta la infección reciente.

Los anticuerpos IgA anti-Toxoplasma son útiles para detectar si la toxoplasmosis es congénita, debido a que estos anticuerpos no atraviesan la placenta.

Por último, tenemos también el test de avidez que es una prueba complementaria a los anticuerpos cuya relevancia consiste en poder diferenciar una infección aguda de la infección reciente no activa. Durante las primeras 20 semanas después de la infección, predominan las IgG de baja avidez, por lo que se han de interpretar como altamente sugestivas de infección aguda, asimismo las de alta avidez serán sugestivas de infección pasada.

 

¿SABÍA USTED?

La toxoplasmosis congénita, es decir, la que le transfiere la mujer embarazada a su hijo, se da sólo cuando la madre contrae la infección durante el embarazo. De ahí la importancia de hacerle estas pruebas a todas las mujeres embarazadas.

 

¿CÓMO SE TRATA?

Si se confirma el diagnóstico, su médico decidirá si se debe tratar. Por lo general no se da tratamiento a personas asintomáticas no embarazadas. En caso de haber síntomas, suelen desaparecer en unas semanas. En cuanto a las mujeres embarazadas y las personas inmunodeprimidas, hay abundante medicación para tratar la toxoplasmosis y ya su médico decidirá la más adecuada para cada caso particular.

 

¿CÓMO LA PUEDE PREVENIR?

  • Utilizando guantes y lavándose las manos después de cualquier actividad que implique manipular tierra. Recuerda que los gatos pueden contagiar a través de sus heces.
  • Lavando con jabón y agua caliente todos los utensilios que hayan estado en contacto con carne cruda cuando se esté cocinando.
  • Cocinar siempre la carne hasta que el centro no esté de color rosado.

 

¿ENFERMEDAD DE LOS GATOS?

Tener un gato no incrementa necesariamente el riesgo de contegiarse. Sólo hay que conocer el ciclo del Toxoplasma Gondii y el papel que juegan los gatos en la transmisión de la enfermedad para quedarse absolutamente tranquilos.

La única forma de que se contraiga toxoplasmosis por culpa de un gato es la siguiente:

  • Que usted nunca antes la haya padecido.
  • Que el gato la esté padeciendo por primera vez (casi siempre el gato adquiere inmunidad para toda la vida después de la primera infección, es decir que sólo puede eliminar quistes por las heces una vez en la vida en la mayoría de casos).
  • En caso que un gato esté infectado, los quistes que elimine por las heces serán infecciosos luego de un período de incubación de entre 1 y 5 días.
  • Que luego de ese período de incubación toque las heces de dicho gato con las manos desnudas y se las lleve a la boca.

Es muy difícil que un gato contagie directamente la toxoplasmosis a su dueño, aun cuando se trate de una mujer embarazada, por varios motivos:

1- Sólo se infectan los gatos que ingieren tejido con quistes, es decir la probabilidad es más alta en gatos callejeros que cazan roedores y/o en gatos domésticos cuyos dueños los alimenten con carne cruda.

2- Un gato sólo elimina ooquistes (quistes infecciosos eliminados por las heces) la primera vez que se infecta en su vida y durante 2 semanas, además como los ooquistes necesitan de 1 a 5 días para volverse potencialmente infecciosos, bastaría con cambiar la bandeja a diario y en caso tal que los haya, serían inofensivos.

 

CONCLUSIÓN

Si bien el gato está implicado en el ciclo vital del Toxoplasma Gondii, no hay que estigmatizarlos y creer que producen ellos como tal la toxoplasmosis. Igualmente, en caso de quedar embarazada y tener un gato en casa, no creer que necesita deshacerse de él o de lo contrario existe una alto riesgo de que hijo nazca con toxoplasmosis. Únicamente hay que tomar todas las precauciones previamente mencionadas en todos los casos para evitar un posible contagio.